El uso abusivo de dispositivos digitales potencia el ciberacoso en la adolescencia
El móvil propio, mensajería instantánea, videojuegos y navegar más de tres horas al día, factores de riesgo del ciberbullying Cuantas más horas pasamos al día estudiando, más fácil nos resulta obtener el aprobado. Con el acoso en Internet ocurre lo mismo. Cuanto más tiempo dedicamos a navegar por la Red, tendremos mayor probabilidad de que nos molesten online. Se trata de una correlación que la lógica ya nos llevaba a deducir y que la Universidad de Oviedo ha corroborado de forma empírica. Los investigadores de este proyecto han determinado que el ciberacoso se manifiesta más en usuarios que han sido previamente víctimas de acoso escolar. La conectividad de los dispositivos digitales han dispuesto una pasarela entre aula y hogar por la que el abuso campa a sus anchas cuando quiere. No es de extrañar, por tanto, que el ciberbullying persiga principalmente a las víctimas de acoso presencial.
Datos del ciberbullying a niños españoles por medio de sus smartphones
El Estudio sobre seguridad y privacidad en el uso de los servicios móviles por los menores españoles, elaborado por INTECO y Orange y presentado en la jornada SmartPhones y Menores: Oportunidades y Riesgos, ha revelado que el 2,5% de los menores ha sido objeto de ciberacoso a través del smartphone por parte de otros menores. Otros datos destacados del informe son: La edad media de inicio en la telefonía móvil por parte de los menores españoles se sitúa entre los 10 y los 12 años. España es uno de los países donde los menores (de 10 a 16 años) afirman ver menos imágenes sexuales online: 11% frente a media europea del 14% También es uno de los países con menor incidencia del ciberbullying: 4%. El 31% de usuarios de más de 13 años usan smartphones (teléfonos inteligentes). El 82,3% de los menores usan su móvil para hacer y enviar fotografías. El 4,8% de los menores encuestados reconoce que su imagen ha sido difundida por otros sin haber prestado consentimiento. El 4,3% de los menores ha recibido imágenes sugerentes de personas de su entorno (sexting pasivo), y un 1,5% reconoce haberse hecho a sí misma/o fotografías de carácter sexy (sexting activo). El sexting activo es más practicado por chicas (2,2%) al contrario que sexting pasivo, más practicado por los chicos (5,1%). Un 3,8% de los menores afirma que ha recibido llamadas o SMS de adultos desconocidos que querían conocerles El 17,8% de los menores dice haber sido objeto de perjuicio económico