Evitar el aislamiento es clave para luchar contra el acoso infantil
En los últimos años, el defensor del menor de Aragón viene percibiendo una creciente preocupación de la sociedad por el aumento de la conflictividad en el ámbito escolar, en general, y el acoso entre menores, en particular. Según el Informe del defensor, a las formas tradicionales de acoso verbal, físico y psicológico, se suma el ciberbullying, el llevado a cabo a través de la red, el teléfono móvil o los juegos on line. En cuanto a las posibles causas del aumento del acoso escolar, el Informe destaca la trivialización de la violencia, en parte debido a una exposición constante a contenidos violentos a través de la televisión, los videojuegos, Internet, etc.; cambios sociales acompañados de pérdida de valores como el respeto a los demás, la autodisciplina o la satisfacción por el trabajo bien hecho; intolerancia a la frustración y, en algunos casos, patologías mentales que se manifiestan a través de conductas violentas. el retrato del acosado es el de un menor débil, con escasa autoestima, indefenso, introvertido e inseguro. Estas características refuerzan la necesidad de evitar el aislamiento del menor mediante su integración, por ejemplo, en deportes de equipo. Por otro lado, los acosadores suelen ser alumnos conflictivos, dominantes y agresivos. Con frecuencia, han sido víctimas de malos tratos o han crecido en un ambiente hostil con falta de cariño. En contra de lo que pudiera parecer, también son inseguros y por eso buscan aliados que les consideren líderes. La lucha contra el acoso requiere la “implicación de toda la
Uno de cada tres casos de bullying en Aragón se realiza por Internet y teléfono móvil
Chantajes con imágenes grabadas, amenazas en un chat o burlas en páginas web. El acoso escolar cambia a la misma velocidad que las nuevas tecnologías y teléfonos móviles e Internet son ya dos herramientas comunes en los ataques entre compañeros de colegio. Este fenómeno se conoce como cyberbullying y ya aparece en una tercera parte de los casos de acoso escolar denunciados por aragoneses en 2007 a la línea de ayuda SOS Bullying. Los expertos señalan que este tipo de ciberacoso es tan peligroso, o más, que los ataques físicos. El problema se ha agravado con la expansión de las nuevas tecnologías. Seis de cada diez niños de entre 10 y 14 años ya tienen teléfono móvil, casi siempre con cámara, y cerca del 80% de los escolares se conectan regularmente a Internet. Estos datos, unidos al desconocimiento que muchos padres tienen sobre la Red, han convertido a Internet y teléfonos móviles en un caldo de cultivo de la violencia escolar. Algunos jóvenes llegan a pagar por ver vídeos y fotos humillantes de sus compañeros. En algunos centros, los acosadores organizan falsos concursos de belleza en los que hacen circular imágenes deformadas o caricaturas de sus víctimas. Incluso hay casos de ciberbullying de contenido sexual. Fuente: 20 minutos.