89% de los padres reconoce que sus hijos han sido amenazados, acosados o humillados en Internet
Según un reciente estudio realizado por la empresa BitDefender en varios países, incluida España, el 89% de los padres reconoce que sus hijos han sido amenazados, acosados o humillados en Internet alguna vez. Además, más de la mitad (54%) creen que sus hijos se han sentido “muy afectados” por ese acoso. Como consecuencia de este acoso cibernético, los niños se pusieron tristes, enojados, violentos, o apáticos. El 19% de los padres tuvieron que buscar ayuda especializada para sus hijos. La amenaza más generalizada según dicho estudio parece ser el acoso cibernético (conocido como ciberbullying): amenazas, humillaciones, hostigamiento, etc. a través de tecnologías como mensajes de texto, correo electrónico o mensajería instantánea. Fuente: Informativos Telecinco
«El ciberbullying obedece a la naturaleza de Internet»
Algunas páginas contraproducentes para infantes son las de pornografía, incluida la infantil, y el bullying, “el maltrato entre pares”, forma virtual de intimidar al compañero de curso. El bullying es la más reciente forma de agresión en internet, que consiste en el hostigamiento al compañero: “Ofenden y maltratan a un estudiante, acción que es grabada mediante cámaras de teléfonos celulares. Luego suben las imágenes a sitios de la red donde se bajan videos”, afirma el Gerente de la empresa de telecomunicaciones Axs Bolivia, Armanda Lara. El resultado: la humillación se amplifica porque no se limita a las paredes del curso. Según Lara, ello obedece a la naturaleza de internet: “Hay sitios blogs —que son personales— en que se puede escribir lo que sea sin develar la identidad”. La exposición de la persona puede ser voluntaria, como sucede en las redes sociales, espacio en que el individuo da a conocer información personal y de su entorno, pero estos datos permiten a desconocidos vulnerar la página o introducir publicidad basura (spam). También se puede duplicar la identidad o dar una falsa por un interés delictivo, fingiendo tener los mismos intereses que la persona engañada. Fuente: LaPrensa.com.bo