«Los ciberacosadores pueden agredir a un jugador hasta transformarlo en acosador de otras personas»
El gamer profesional Alexander González cree que los videojuegos pueden usarse para prevenir el acoso escolar Los videojuegos han sido objeto de crítica prácticamente desde su génesis, pero especialmente desde su popularización en los tiempos de las tecnologías conectadas. Si bien las competiciones de esports comenzaban a transmitir un mensaje positivo, la reciente inclusión de la adicción al videojuego en el manual de trastornos reconocidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha vuelto a estigmatizar el uso de estos juegos de pantalla. Evidentemente, cualquier exceso puede acarrear consecuencias nocivas, pero tomados con conciencia y responsabilidad, los videojuegos pueden ayudarnos a prevenir el acoso escolar. Alexander González, también conocido por su nickname «Mezuky» puede dar buena cuenta de ello. Fundador y presidente de la asociación Eusko Esports, se dedica de manera profesional a los esports como jugador de Hearthstone en el equipo Cometa Team y como organizador de eventos de este tipo. Mezuky reconoce que encontró en los videojuegos su vía de escape. No recuerda con demasiada alegría su trayectoria escolar, ya que durante muchos años sufrió bullying en el colegio. Sin embargo, a través de ese universo electrónico podía comunicarse con otras personas afines y desviar la atención de los compañeros que en clase le daban la espalda. Aunque, pasado un tiempo, tantas horas invertidas en la pantalla se traducirían en una adicción que le haría darse cuenta de los riesgos que implica sumergirse de lleno en el mundo de los videojuegos. Gracias a esa experiencia, es capaz
TEI, la «tutoría entre iguales» como método de prevención del acoso escolar
La convivencia se erige como el estado ideal a alcanzar en cualquier sociedad. Para que un grupo funcione precisa de unas normas comunes que garanticen el respeto entre sus integrantes. A menudo, la falta de tolerancia entre adultos provoca que la convivencia fracase, de modo que se asume un gran esfuerzo en el intento por implementar una coexistencia tolerante entre las edades más tempranas. El programa TEI trata de enfocarse, precisamente, en el respeto entre iguales, la empatía y el compromiso como garantía de convivencia positiva en el periodo escolar. El bullying y el ciberacoso suponen dos de los monstruos a los que niños/as y adolescentes deben enfrentarse diariamente dentro e incluso fuera del aula. Las investigaciones concluyen que entre el 40% y el 55% del alumnado de los centros educativos participa de alguna manera en situaciones de acoso escolar, bien como víctimas, agresores/as u observadores/as. También se sabe que entre el 20% y el 50% informan de experiencias de acoso verbal y del 2% al 7% de los estudiantes han sido víctimas de una forma severa de agresión física. ¿Qué es el «TEI»? La educación secundaria se ha convertido en el espacio de proliferación del acoso en el entorno educativo. El proyecto «Tutoría entre Iguales» (TEI) se dirige directamente a este grueso estudiantil con la orientación de prevenir la violencia y el ciberacoso escolar. El autor del TEI es el catedrático de orientación educativa, Andrés González Bellido y aunque inició su desarrollo en el año 2002, el proyecto no